Variante “Frankenstein” al acecho: quiénes y cada cuánto hay que vacunarse contra el covid
El infectólogo Eduardo López fue categórico al advertir sobre la situación actual: “Agarra a la población con poca inmunología”, dijo, señalando la vulnerabilidad generalizada frente a un posible nuevo pico de contagios. Su preocupación está sustentada por los datos que arroja el Registro Federal de Vacunación Nominalizado (Nomivac).
En lo que va de 2025, más del 99% de los argentinos no recibió ninguna dosis contra el Covid. Apenas el 0,65% de la población mayor de 6 meses —que es el grupo con indicación de vacunación— se aplicó alguna vacuna. Y el panorama en 2024 fue apenas mejor: solo el 3,8% accedió a una dosis.
Más de 96 de cada 100 personas están desprotegidas contra el virus
Las recomendaciones oficiales indican que, para mantener una respuesta inmune efectiva, es necesario vacunarse cada 6 o 12 meses, dependiendo del grupo etario y las condiciones de salud. Bajo esa lógica, el 96,2% de la población no tiene los anticuerpos activos requeridos para enfrentar al virus, lo que los convierte en potenciales susceptibles frente a un eventual rebrote.
Desde el 1° de enero hasta el 7 de agosto de 2025, se aplicaron apenas 298.329 dosis en todo el país, lo que representa un promedio de 1.356 aplicaciones diarias. Del total, el 55% fueron recibidas por mujeres. En cuanto a las vacunas utilizadas, la mitad fueron de Pfizer y la otra mitad de Moderna.
La caída en la vacunación es notoria. En todo el 2023 se habían aplicado 3.792.462 dosis, cifra que en 2024 descendió a 1.711.503. Lo que ocurre en 2025 marca un derrumbe absoluto del interés por vacunarse, tanto en el sistema público como en el privado.

Los grupos más vacunados en 2025: mayores de 49 y jóvenes adultos
Según los datos de Nomivac, el grupo que más se vacunó este año fue el de personas de 70 a 79 años, con 68.086 dosis aplicadas, seguido por los de 60 a 69 años (64.618 dosis) y el segmento de 50 a 59 años (38.692 dosis). Llama la atención que, fuera del orden cronológico, el siguiente grupo en número de aplicaciones fue el de jóvenes de 18 a 29 años, con 31.868 dosis.
Luego, aparecen los de 40 a 49 años, con 28.046 dosis, y quienes tienen entre 30 y 39 años, con 24.267. Un dato preocupante surge al observar que en el grupo más vulnerable por edad, los mayores de 80 años, solo se aplicaron 23.238 dosis.
Entre los niños y adolescentes, las cifras son aún más bajas: en la población de hasta 12 años se registraron apenas 9.374 dosis aplicadas, mientras que el grupo de 12 a 17 años recibió menos aún.
Vacunación estancada incluso con opciones accesibles y locales
De las dosis aplicadas en 2025, el 44,6% fueron a personas sin factores de riesgo, mientras que el 30,9% sí los tenía. El resto se distribuyó entre personal de salud, estratégico y embarazadas, según los registros oficiales. Este comportamiento refleja una baja percepción del riesgo sanitario, aún con opciones disponibles en todo el país.

Incluso la vacuna argentina ARVAC, desarrollada localmente y comercializada en farmacias, tuvo escasa demanda. Según fuentes de la industria, en lo que va del año, fueron apenas unas 10 mil las unidades vendidas, a pesar de que es una alternativa segura y aprobada.
Desde el Ministerio de Salud reiteraron que “es importante que todas las personas a partir de los 6 meses de edad cuenten con esquema primario y al menos un refuerzo aplicado en los últimos 6 meses y continúen con la periodicidad de acuerdo a las siguientes recomendaciones”, detallando los esquemas según el riesgo de cada grupo.
Quiénes y cada cuánto deben vacunarse
Un reciente comunicado del Gobierno recordó que “es importante que todas las personas a partir de los 6 meses de edad cuenten con esquema primario y al menos un refuerzo aplicado en los últimos 6 meses y continúen con la periodicidad de acuerdo a las siguientes recomendaciones”:
–Riesgo alto de Covid-19 grave: personas de 50 años o mayores, embarazadas y personas con inmunocrompromiso a partir de los 6 meses de vida. Se aplicará una dosis de refuerzo a los 6 meses desde la última dosis aplicada y luego continuará con la misma periodicidad (cada 6 meses).
-Riesgo intermedio de Covid-19 grave o alta exposición laboral a SARS CoV-2: personas menores de 50 años con comorbilidades no inmunosupresoras (enfermedades crónicas, obesidad), personal de salud y personal estratégico. Dosis de refuerzo a los 6 meses desde la última dosis aplicada y luego continuar con una periodicidad anual.
-Riesgo bajo de Covid-19 grave: personas entre 6 meses y 49 años inclusive sin comorbilidades. Dosis de refuerzo a los 12 meses de la última dosis aplicada y luego continuar con periodicidad anual. (Con información de Clarín)